Arte

«Mi obra es un proyecto vital»

Paco Dalmau es artista. De origen castellonense, ha forjado su carrera en Países Bajos, en la ciudad de Róterdam, en la que reside desde hace más de una década. Allí ha desarrollado su obra marcada por la abstracción, presentándola en prestigiosas ferias, museos, instituciones y galerías nacionales e internacionales.

Su obra muestra la influencia mediterránea de la luz combinada con numerosas influencias de artistas contemporáneos. Son formas abstractas donde el color se convierte en una batalla emocional para el artista. En su estudio crea, transforma y observa con paciencia y meticulosidad estas tormentas cromáticas, dejando que sucedan y que le sorprendan, pero siempre controlándolas con el método y la experiencia que le han dado los años.

También es gestor cultural y director de la fundación, Wall White Foundation con la que ha desarrollado ya cinco ediciones de White Wall Project, un evento de arte y cultura que busca la participación ciudadana.

En esta entrevista Paco Dalmau nos habla con honestidad de su intenso recorrido vital y profesional, de la investigación plástica que desarrolla, de los cambios y las adaptaciones en cada etapa de su vida y de aquellas personas que siempre han creído en él y le han acompañado en este camino.

– ¿Cuándo comenzó tu interés por la creación plástica?

Mi interés siempre estuvo ahí desde muy pequeño, siempre fui el chico que mejor dibujaba de la clase. Recuerdo el dibujar y colorear de forma constante, terminaba los ejercicios rápidamente, aparentemente de forma correcta, y continuaba dibujando en clase. Con 4 años, mi profesora me sacaba a la pizarra a dibujar, y recuerdo estar subido en una silla y ocupar cada espacio al que alcanzaba siendo tan pequeño, repleto de dibujos imaginarios, retratos de mis compañeros, naturalezas
muertas o el espacio de la clase.

Mis profesoras de infantil y mis padres fueron siempre muy conscientes de mi capacidad para el dibujo y todo lo concerniente a temáticas creativas, y pienso que me dirigieron muy bien para canalizar este talento correctamente. Yo no fui un niño fácil, mi adaptación a los sistemas sociales convencionales, los roles de cada individuo en los grupos, la presión social… en fin, era un tanto complicado para mí, pero mediante el arte me podía comunicar perfectamente, me sentía cómodo, y esta capacidad a fin de cuentas, definía mi lugar dentro de la dinámica de la clase, siempre saqué buenas notas, pero el entramado social nunca fue lo mío.
De todos modos, esta aptitud para el arte nunca me abandonó, y ya con 15 años, mis padres decidieron el reforzar mi vocación.

Mi padre era amigo de un reconocido pintor valenciano, por desgracia ya fallecido, Pepe Biot, galardonado con el Premio de las Artes Plásticas de la Generalitat Valenciana, y el cual a mediados de los 90 abrió su taller en Vila-real, mi ciudad natal.
Empecé a ir cada tarde a su taller para aprender a dibujar y pintar. Sin duda, aquellos años fueron los que consolidaron mi pasión por el arte en general, y la profesión en particular.

«mediante el arte me podía comunicar perfectamente, me sentía cómodo, y esta capacidad a fin de cuentas, definía mi lugar dentro de la dinámica de la clase»

«Empecé a ir cada tarde a su taller para aprender a dibujar y pintar. Sin duda, aquellos años fueron los que consolidaron mi pasión por el arte en general, y la profesión en particular»

– Simultáneamente cursaste tus estudios en la Escuela de Arte y Diseño EASD de Castellón ¿Cómo contribuyeron ambos ambientes en tu formación?

Eran dos mundos paralelos, en ambos lugares encontré la forma de estar conectado con personas interesadas en el arte a diario. En la Escuela de Arte, Artes y Oficios como se denominaba por aquel entonces, estudié con gente de mi generación con las mismas inquietudes, conservo buenos amigos, como el artista de performance Álvaro Terrones que actualmente imparte clases en la politécnica de Valencia. Por las mañanas en lugar de estudiar matemáticas y química, estudiábamos dibujo, pintura, cerámica e historia del arte, fue una época muy buena. Y como complemento, por las tardes en el taller de Biot, aparte de compartir enseñanzas con los demás estudiantes, el lugar también era punto de reunión de artistas e intelectuales de la zona, nombres como Arturo Doñate, Alejandro Font de Mora o Mariano Poyatos eran asiduos, y aprendí mucho escuchando sus conversaciones. Lo recuerdo como un aprendizaje intergeneracional, en la escuela frescura, en el taller experiencia, en ambos lugares descubrimiento y la sensación de confirmación en mi pasión por el arte.

«aprendí mucho escuchando sus conversaciones. Lo recuerdo como un aprendizaje intergeneracional»

«en la escuela frescura, en el taller experiencia, en ambos lugares descubrimiento y la sensación de confirmación en mi pasión por el arte»

– Posteriormente te trasladaste a Barcelona donde te formaste en Bellas Artes en la Escola Privada d’Art Sanvisens ¿cómo cambió tu manera de entender el arte allí?

Bueno, Barcelona fue para mí un periodo duro, primera vez viviendo solo, trabajando y estudiando en una ciudad tan grande con tan solo 20 años, y bueno… me sentía un tanto despistado, llamémoslo así. Volví a sentir esa presión social de mi infancia, y el asimilarlo y sobreponerme costó un poco de tiempo al principio. De nuevo, la ayuda de mis padres, hermana y hermano fue lo más importante, y entre todos decidimos que debía seguir con esta experiencia.

Y una de estas decisiones fue la de asistir a la Escola Sanvisens por las tardes, algo que resultó todo un antídoto para mí. La escuela significó el no perder en Barcelona lo que tanto me había ayudado para mi formación en Vila-real, el asistir cada día al taller de un artista, y estar en contacto con otros artistas veteranos, en un ambiente sin presión y en constante conversación.

Para mí, estas influencias venidas desde la experiencia profesional siempre fueron muy valiosas, tanto en lo técnico y conceptual como vital. Seguramente siempre tuve el anhelo de poder vivir esa vida tan idealizada del artista autónomo, una vida de libertad creativa, un tanto solitaria, introspectiva, una vida en la que pudiera trabajar y crear mi propio mundo. Muchas de estas ensoñaciones de entonces están ocurriendo ahora, aunque la vida real es distinta, ¿no es cierto?

La escuela estaba dirigida por Teresa Llacer, reconocida artista en Catalunya y profesora del área de dibujo y pintura de la Facultad de Bellas Artes de Barcelona por más de 30 años, y como profesores asistentes, Jordi y Ángel González Llacer, el primero historiador del arte con extensa obra publicada, el segundo pintor abstracto.

Aprendí mucho con ellos también. Las clases versaban en la importancia de la composición, el uso de color en el lienzo o intensas sesiones de dibujo en movimiento con modelos, sin duda, una base académica y tradicionalista, que todavía cimienta mi planteamiento creativo. Mira si aprendí, que incluso quedé segundo en un premio de pintura para profesionales en Sitges siendo tan solo un crio!

«Para mí, estas influencias venidas desde la experiencia profesional siempre fueron muy valiosas, tanto en lo técnico y conceptual como vital»

«siempre tuve el anhelo de poder vivir esa vida tan idealizada del artista autónomo, una vida de libertad creativa, un tanto solitaria, introspectiva, una vida en la que pudiera trabajar y crear mi propio mundo»

– Pasado el periodo de formación, vuelves a tu ciudad natal y comienzas tu recorrido profesional, ¿cómo son esos años antes de continuar tu carrera en el extranjero?

Empecé mi trayectoria como profesional desde mi estudio en Vila-real, estuve allí unos 4 años antes de trasladarme al extranjero. Realicé mi primer proyecto artístico llamado Polyptychs, en el cual trabajé los conceptos de retrato, pintura monumental e instalación. Presenté esta colección de 17 pinturas enormes en la Fundación Bancaixa de Castellón, en 2010 y en el Museo de la Ciudad de Vila-real en 2011. Entre tanto, participé en tres exposiciones colectivas en una pequeña galería de Chelsea, Manhattan, A-forest Galley, y sopesé la idea de trasladarme a New York, pero lamentablemente, económicamente era imposible por aquel entonces.
Pero lo tenía claro, para progresar en mi carrera necesitaba un cambio y el moverme por Europa era mucho más asequible y sin duda también muy enriquecedor. Por lo que decidí mudarme a Países Bajos.

– Y actualmente vives y trabajas en Róterdam desde 2012, ¿Cómo fue tu llegada a la ciudad y cómo transformó tu vida?

Llegué de la mano de la Galería Hommes, dirigida por Jannie Hommes y situada en la zona sur de la ciudad, en el barrio de Charlois. La galería tenía un programa de artistas en residencia y fui invitado a realizar un año de estancia. Empecé a trabajar en mi segundo proyecto pictórico: Fractions, en el cual quise profundizar en la idea del diseño expositivo y la combinación pintura con instalación, en este caso, creando formatos geométricos, cuadrados, triángulos y apartándome definitivamente de la figuración, siendo los resultados pinturas monocromáticas y composiciones de varias piezas en gama de grises.

Fascinado por obras como Blanco sobre Blanco de Malévich, y artistas como Gotthard Graubner o Donald Judd, intenté crear mi mundo, y como digo, dejando de lado la figuración y el color… el color, que como buen hijo del Mediterráneo, siempre me ha acompañado. Ahora y con la perspectiva de 12 años, pienso que esta serie supuso un silencio necesario en mi camino, una breve pausa para reflexionar y volver con fuerzas a la batalla emocional que para mí siempre ha representado el color. Finalmente el proyecto fue expuesto en la galería en el año 2013, y pase a ser representado en Países Bajos por Hommes hasta el año 2020, cuando Jannie, desafortunadamente cerró la galería.

«intenté crear mi mundo, y como digo, dejando de lado la figuración y el color… el color, que como buen hijo del Mediterráneo, siempre me ha acompañado»

«esta serie supuso un silencio necesario en mi camino, una breve pausa para reflexionar y volver con fuerzas a la batalla emocional que para mí siempre ha representado el color»

Pero la experiencia personal fue excelente desde el principio, encontré una comunidad de artistas internacional y de mi generación, gentes con las mismas inquietudes. Y lo más importante, conocí a mi esposa, Niki van Strien, la cual es mi compañera y mejor amiga, critica número 1 de mi obra, y gran apoyo en todo. Viví en la residencia de Hommes durante 1 año, y luego nos mudamos a vivir al edifico de estudios para artistas B.A.D Foundation, de el que Niki es artista miembro.

Un lugar excelente, una escuela de ladrillo de los años 50, en la que cada aula se transformó a finales de los 80 en estudios para artistas o vivienda, y en donde a diario, y por 11 años he podido estar en contacto diario con otros artistas, grandes nombres en Países Bajos, como Jeroen Jongeleen, Janine Schrijver o Frank Bruggeman.
De nuevo, rodeado de artistas veteranos de los que aprendí y aprendo.

– ¿De qué manera ha influenciado la cultura de los Países Bajos en tu carrera y tu obra?

Mi carrera se ha forjado en Países Bajos, soy un artista español que ha hecho y está haciendo carrera desde Países Bajos para al resto del mundo. La influencia neerlandesa sin duda es grande, no sé si tanto para el contenido de la obra, pero sí en la forma de afrontar la planificación, producción y proyección de mi carrera, para lo que sería el plan de negocio. Nunca dejo asuntos para mañana, cada inicio de temporada planifico los objetivos, y de forma muy «neerlandesa» busco eficiencia. Pienso que esta es la palabra que define mejor su cultura de trabajo: eficiencia y estar al día con las fechas.

En cuanto a mi obra, bueno, nuestra realidad y específicamente la realidad del mundo occidental, es consecuencia de legados y procesos históricos en general, y herencias culturales y genéticas en particular, nuestro presente se construye desde estas referencias. Como artista, y desde mi reflexión acerca de mi trayectoria, siempre quiero tener presente el camino recorrido, es decir, la herencia o huella que cada proyecto ha dejado en mi obra presente.

Diría que mi obra, y concretamente mi obra pictórica es un proyecto vital que simplemente está influenciado por la historia de la pintura y el arte contemporáneo, desde Vermeer pasando por Joaquim Mir o Chuck Close hasta James Turrell, por decir algunos, pero aunque no tengan nada ver con mi trabajo actual, todos han contribuido a formar mi identidad artística personal y más reconocible.

«mi obra, y concretamente mi obra pictórica es un proyecto vital que simplemente está influenciado por la historia de la pintura y el arte contemporáneo»

«aunque no tengan nada ver con mi trabajo actual, todos han contribuido a formar mi identidad artística personal y más reconocible»

Pero bueno, si me preguntas por Países Bajos, es posible que mi obra actual este mucho más cercana, y hablando de posibles influencias neerlandesas o norte europeas, al Grupo Cobra, y algunos de sus artistas como Karel Appel o Eugène Brands, por el uso del color y la abstracción de sus composiciones. Aunque, y en mi opinión, el movimiento que continua siendo más influyente, tanto en arte como en diseño en Países Bajos es el movimiento De Stijl. Seguramente Fractions estaba más ligada con esta línea constructivista, aunque como digo, todo está entrelazado, interconectado.

Mi galerista de Róterdam, Peter Koopmans, una vez me dijo: «sabes Paco, no sabría en qué movimiento concreto catalogar tu obra, no lo sé, pero me encanta, lo veo y lo quiero tener». Creo que comentarios de este tipo, dicen mucho de la genuinidad de mi obra, y de lo complejo en buscar influencias o referencias en ella, más si cabe, viniendo de la persona que vende las pinturas.

– Actualmente, toda tu producción plástica se centra en el desarrollo del proyecto Circuits Collection y el concepto de metamorfosis ¿en qué consiste y qué motiva este proyecto?

Efectivamente, el título de la colección hace referencia a la conexión que existe entre cada serie o proyecto artístico que he desarrollado hasta la fecha. Realmente, Circuits es el lugar en donde ordeno mi obra, probablemente más a modo personal que por la influencia que pueda tener para el espectador, pero pienso que sin duda ayuda a comprender mi trayectoria y el porqué de lo que hago.

La idea continúa siendo la misma, cada nueva serie es consecuencia de su predecesora, tan sencillo como la vida misma, el presente siempre es consecuencia de decisiones tomadas en un momento concreto del pasado, y en mi caso, mi obra se desarrolla de este modo.

La génesis y nexo común de cada serie siempre es la pintura como planteamiento plástico, y la temática, el recorrido vital de un individuo, en este caso una pintura, envuelto un viaje de disrupción personal, de cambio continuo que redefine su identidad en cada serie, lo que sería el concepto de metamorfosis que mencionas en tu pregunta. Return series, Evolution series, Borderline series y Revolution series, conforman mi propuesta hasta fecha. Te lo puedo resumir así:

Return representa la heterodoxia del medio, es decir, pinturas abstractas de corte clásico, realizadas al óleo, en donde busco el crear composiciones con elementos indeterminados, manchas de color que forman atmósferas difusas, misteriosas y melancólicas. Esta serie marca el inicio de la colección, y de antiguas pinturas de la misma nunca expuestas, buenas pinturas, pero que tuvieron un propósito distinto y determinante en mi trayectoria. De ahí nació la serie Evolution.

Con Evolution, la pintura experimenta su primera metamorfosis dentro de la colección, técnicamente se fusiona con la escultura y busca una identidad ambigua y en cierto modo, embrionaria, con referencias al mundo microscópico, presenta formas orgánicas, exalta los colores y crea un universo distinto, más extraño y delirante.
Comencé las primeras pruebas en 2018 y a partir de 2020 esta serie ha ocupado sin descanso más horas de trabajo.

Seguidamente, la serie Borderline plantea mi visión del concepto de disrupción personal narrado desde de la pintura. Esta serie quiere plasmar el desbordamiento emocional que significa estar inmerso en un cambio radical. Presento obras en donde la pintura quiere escapar de lo establecido, escapar del lienzo, quiero mostrar el descontrol y la incapacidad de controlar tus deseos y emociones. La serie es bastante reciente, de principios de 2023 y sus primeras piezas y pruebas, en este caso llegaron de
residuos del proceso de producción de Evolution.

Revolution series está en proceso de desarrollo, pero conceptualmente lista para su ejecución. Tendrá la función de epílogo para esta colección, en donde la temática central de la metamorfosis, disrupción personal, regulación de las emociones, se presentará como instalación de grandes dimensiones. Quiero que esta obra cierre el círculo de Circuits planteando el nacimiento de una nuevo status quo para la pintura, pero entiéndeme, no soy tan pretencioso, me refiero a la pintura dentro de mi obra, de mi trayectoria. Como buena revolución, quiero presentar muchos de sus elementos, lucha, terror, esperanza, destrucción de lo establecido y finalmente el nacimiento de una nueva realidad, una nueva era.

«cada nueva serie es consecuencia de su predecesora, tan sencillo como la vida misma»

«el presente siempre es consecuencia de decisiones tomadas en un momento concreto del pasado, y en mi caso, mi obra se desarrolla de este modo»

– ¿Cómo es tu proceso de trabajo y tu día a día en el estudio? 

Siempre trabajo con varias piezas al mismo tiempo, ya que así, nunca me encuentro atascado con una pieza en concreto, algunas se resuelven en pocos meses, otras se alargan un poco más en el tiempo, pero siempre controlando que mis compromisos expositivos estén al día. Pero mira, el saber tomar distancia con ciertas obras por un tiempo es algo que se aprende con la experiencia, al fin y al cabo, el acto creativo es un diálogo del artista con su obra, y este dialogo no siempre es fluido, de hecho casi nunca es fluido.

Mi metodología propicia que cada pintura me plantee un nuevo reto, de este modo, lo que llamamos zona de confort, queda fuera de la ecuación. Mi experiencia me dice que muchas obras se pintan sin pintarlas, se pintan observándolas. En cierto modo, es la misma aptitud que el espectador debe tener ante una obra de arte, los problemas y misterios necesitan tiempo para ser resueltos, y una pintura necesita tiempo para ser descifrada, tanto en el estudio como en un museo.

Este proceso me ha llevado a consolidar una rutina diaria específica de trabajo, sencilla y personal. Trabajo en el estudio cada día durante la semana, preparo café, escucho la radio, podcasts y música mientras pinto, en las pausas leo y busco información sobre temas que me puedan ayudar a completar mi obra. Me interesan ensayos sobre filosofía, el humanismo, Espinosa, pienso que los Diálogos de Platón son una buena forma de adentrarse en el pensamiento crítico, el mercado del arte, la actualidad política o la psicología, tan relevante en mi propuesta.

Por ejemplo, los estudios de la relación entre los colores y las emociones de Robert Plutchik, psicólogo estadounidense que creó la rueda de la emociones, asignando a cada color un emoción, o el libro psicología del color de Eva Heller, que realiza un trabajo estadístico impresionante acerca de la percepción y significado emocional que asignamos a cada color. El revisar autores de este tipo forma parte de mi rutina, ya que encuentro un buen apoyo para gestionar las combinaciones de colores en mis pinturas.

Pero lo más importante para mí, es que pasados los años, he conseguido crear las condiciones externas adecuadas que me aporten tranquilidad y estabilidad en el estudio, para que las tormentas, complicaciones y momentos de euforia ocurran durante el proceso creativo la obra.

«he conseguido crear las condiciones externas adecuadas que me aporten tranquilidad y estabilidad en el estudio»

«para que las tormentas, complicaciones y momentos de euforia ocurran durante el proceso creativo la obra»

– Pero aparte de tu trabajo en el estudio, tu iniciativa de arte público, White Wall Project es muy importante y reconocida en tu carrera, además eres director de la White Wall Foundation ¿cómo surgió esta iniciativa y qué proyectos habéis realizado? 

White Wall Project es un proyecto como bien dices muy reconocido en Países Bajos, y hasta la fecha he realizado cinco ediciones en distintas ciudades del país, siempre con mucho éxito, y en constante evolución. El proyecto en esencia y dejando de lado las particularidades de cada edición, se basa en la construcción de una instalación site-specific, fabricada con tela y madera, como un gran lienzo de pintura, en espacio público y en donde invito tanto artistas como gente de la comunidad de la zona a trabajar en ella con pintura.

Para que te hagas una idea de la evolución de la obra, la primera edición en 2013, y totalmente autofinanciada fue en el interior de un café en Róterdam, la única edición que no se realizó en espacio público, y en donde invité a un grupo de 12 artistas que transformaron el café durante 4 semanas, fue simplemente genial. La última en 2018, fue una instalación descomunal de 800 metros de largo en un parque público, que involucró la participación de tres ciudades, Maasluis, Vlaardingen y Schiedam, esto supuso una gran diferencia. Entre medias, 3 ediciones más, todas preciosas y de gran acogida, invito a tus lectores a visitar la web del proyecto.

Creé la fundación para darle consistencia al proyecto y para recaudar fondos tanto públicos como privados, tengo que decir que el proyecto es una gran producción, en la que mi rol como artista, llega un momento que pasa a ser el de productor, director y cara visible de toda la gente que trabaja llevarlo a cabo.

A partir de la pandemia, decidí el congelar la iniciativa, como todos sabemos, la gente no se podía reunir, por lo tanto no podía pintar junta, así que decidí centrarme en mi trabajo con Circuits Collection, y por el momento, estoy enteramente centrado en mi práctica en el estudio, cuando se reúnan las condiciones que tengo planificadas para la sexta edición, lo retomaré.

El proyecto de White Wall Project en su edición de 2018 fue premiado con el Waterweg cultuurprijs 2017, prestigioso concurso destinado a fomentar desde la cultura la integración social con proyectos de distinto ámbito, tanto artístico como educativo, este premio supuso el despegue del quinto proyecto. Tuvo una aceptación de gran repercusión, de participantes, público, y mediática. Este proyecto es parte muy importante de mi vida en Países Bajos, gracias a él, he conocido a muchísima gente fantástica, que me ayudó mucho, tanto personal como profesionalmente.

– Tu obra se ha mostrado en Stedelijk Museum Schiedam, Museum Belvedere y PAN Amsterdam entre otros ¿cómo es el mundo del arte contemporáneo allí y qué acogida tiene tu obra? 

Estoy muy contento de la acogida y crítica que mi obra tiene en los Países Bajos, he tenido ya la oportunidad de exponer en museos, instituciones culturales y galerías, los que mencionas son grandes museos del país. Con Contempo Galerie, galería que me representa actualmente en Países Bajos participo regularmente en las ferias más grandes del país, en Ámsterdam, ferias como PAN o KunstRai, y también, cuento con el apoyo y la complicidad de muchos colegas artistas y comisarios para participar en proyectos expositivos, la verdad, muy agradecido a la sociedad neerlandesa por su acogida desde el primer día.

Y a nivel institucional también muy agradecido, mis proyectos han sido premiados y becados por instituciones como Mondrian Fonds, CBK Rotterdam o Droom en Daad Foundation, algunas de las más importantes del país, y en el caso de Mondrian Fonds, la más importante de Benelux. Y en cuanto al mundo del arte contemporáneo, bueno, igual que en España, muy buenos artistas, no es un sector excesivamente grande, por lo que puedes conocer a bastantes agentes sin demasiados problemas, pero competitivo y jerarquizado. Mi objetivo es seguir creciendo año a año, y mi proyección desde Róterdam está yendo por ese camino.

– Estás representado por la Galería La Mercería en Valencia, Contempo Galerie en Róterdam y Alfa Gallery en Miami ¿cómo es trabajar con galerías de procedencias tan diferentes?

Realmente fantástico, muy inspirador, siempre tenemos algún proyecto en perspectiva, exposición o feria de arte, y mi relación con las tres es excelente. Con Ignacio Bofarull, director de La Mercería, la relación es muy cercana, yo estoy muy comprometido con su proyecto, somos de la misma generación y llevamos trabajando juntos desde 2018, por lo que personalmente, y aparte de la relación profesional, tenemos una amistad muy consolidada. Para mí es muy importante el tener vínculo con España y con mi tierra, la galería de Valencia está creciendo, con muy buenos artistas como compañeros, Dimasla o Roice, e Ignacio está participando en las ferias de Madrid, Urvanity o Art Madrid, esto es bueno para todos, es la línea a seguir.

Contempo Galerie en Róterdam es una galería de renombre en Países Bajos, con 37 años de experiencia en el mercado, participan en las mejores ferias del país, PAN o KunstRai, de la que Mark Sleger, director de Contempo es también co-director y fundador de la feria. Están especializados en pintura y escultura y trabajo con ellos desde 2021, la relación es también muy natural y directa, como con Ignacio, aunque claro, Mark y Peter son de una generación anterior, y seguramente mi actitud es un poco más formal cuando estamos hablando del trabajo. Mis compañeros en la galería son artistas de renombre en el país, como Tjibbe Hooghiemstra o el neoyorkino Cole Morgan, todo un honor para mí el formar parte de esta selección tan exclusiva.

Y para terminar Alfa Gallery en Miami y Nueva york, la galería es un proyecto dirigido por artistas, artist-run space, la relación es muy profesional, y su manager Luz Amparo una persona muy atenta, desde la pandemia el espacio básicamente trabaja online, y actualmente están presentando obra de los artistas en Artsy, la mejor y sin duda más influyente plataforma online del mercado del arte mundial, lo considero una apuesta distinta y la verdad, están vendiendo, estoy contento.

Pero en definitiva, el espíritu es con las galerías es el de formar un equipo, cada uno con su un rol bien determinado. Yo, como artista, el crear, evolucionar y mejorar, tanto conceptual como técnicamente en cada proyecto, cumplir con las deadlines, y producir y aportar obra de calidad para la galería, sus clientes y los espectadores. Ellas, promocionar mi obra, presentarme al gran público en ferias, y darme respaldo en todo lo necesario para que esa evolución y producción no pare.

– Tu obra se encuentra en la colección del Centro de Arte Hortensia Herrero, junto a la de artistas como Alexander Calder, Anselm Kiefer, Georg Baselitz, Anish Kapoor, Cristina Iglesias, Eduardo Chillida o Julio González entre otros ¿qué ha significado para ti este reconocimiento?

Que mi obra esté expuesta en el museo que alberga una de las colecciones de arte contemporáneo más importante de España, pues imagínate, es todo un honor y un objetivo cumplido en mi carrera. Las obras, dos piezas de la serie Evolution, están expuestas para el público desde la inauguración del museo en Valencia, en noviembre del 2023. Y claro, compartir espacio con los artistas top del arte contemporáneo, algo muy especial.
La obra fue adquirida en mi última exposición individual en La Mercería, fue en septiembre del 22, mi exposición inauguraba la temporada de la galería dentro del evento Abierto Valencia, y Hortensia Herrero, visitó la exposición y personalmente eligió las dos piezas para su fundación, para después ser expuestas en la colección del nuevo museo. Ella visita constantemente los estudios de gente como, Anselm Kiefer, Jaume Plensa u Olafur Eliasson, imagínate cuando Ignacio Bofarull me llamó para darme la noticia, me dijo: «¿estas sentado?».

«estar expuesto en el museo que alberga una de las colecciones de arte contemporáneo más importante de España, es todo un honor y un objetivo cumplido en mi carrera»

«Hortensia Herrero, visitó la exposición y personalmente eligió las dos piezas para su fundación, para después ser expuestas en la colección del nuevo museo»

– Tu trabajo se va a presentar próximamente en tres ferias, una en Grecia y dos en Ámsterdam ¿Cómo afrontas la nueva temporada?

Sí, comienza la nueva temporada, y la agenda continúa su curso, a fecha de hoy tengo planificadas para octubre, Platfom Projects Art Fair en Atenas, con Tupajumi Foundation de Róterdam, un proyecto de un buen amigo comisario, Jonathan den Breejen. También en octubre de 2024 con Contempo Galerie primera participación de la galería en la Affordable Art Fair en su edición de Ámsterdam y PAN Ámsterdam. Para 2025, KunstRai Ámsterdam y Art Madrid con La Mercería.

En mayo de 2025, tengo programado con Ignacio en La Mercería de Valencia, un duo show con mi compañero artista de Róterdam Jochem Rottervel, representado en España por Garna Gallery en Madrid. Jochem es un artista con gran recorrido que trabaja con materiales no convencionales, crea formatos pictóricos con papel vinilo, de colores saturados y formas muy interesantes. Esta exposición es un proyecto que me hace especial ilusión.

Cuando le planteé la posibilidad de trabajar juntos para un proyecto en Valencia, no se lo pensó, lo hable con Ignacio, le gustó el planteamiento y pienso que conjuntamente con mi obra, probablemente nuevas piezas de Borderline, organizaremos una exposición de gran nivel. Desde aquí quiero invitar a todos tus lectores, tanto a Valencia y Madrid, como a Atenas y Ámsterdam.

– Un deseo que te gustaría se hiciera realidad.

Mira, hace poco tiempo, escuché un podcast de la psiquiatra Marian Rojas, en este audio decía: «pensar constantemente en el pasado es sinónimo de depresión, pensar constantemente en el futuro de ansiedad, las dos peores pandemias contemporáneas de la humanidad».

Por lo que, intentando estar siempre focalizado en el presente, te puedo decir que muchos proyectos y deseos de futuro se proyectan, como por ejemplo, tener mi primera exposición en un museo importante de España, uno de mis objetivos a corto-medio plazo, o el dar el salto a alguna de las grandes galerías internacionales, el expandir mi mercado a Asia.

Estos son proyectos futuribles, y yo como artista autónomo siempre estoy abierto a escuchar ofertas y nuevos proyectos, siempre tengo que mirar el subir un escalón más en mi carrera, pero desde el presente. Desde aquí y ahora mi deseo es el de seguir mejorando cada día mi proyecto, siendo muy profesional con mis compromisos, y aportando contenido interesante al mundo del arte contemporáneo.

«mi deseo es el de seguir mejorando cada día mi proyecto, siendo muy profesional con mis compromisos, y aportando contenido interesante al mundo del arte contemporáneo»

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