8×8 (infinito x infinito) es un proyecto curatorial de entrevistas a mujeres artistas y gestoras culturales dirigido por Andrea Perissinotto con la colaboración de YANMAG
«Soy una artista empática con los acontecimientos»
Lina Ávila sintetiza emociones colectivas en collages, poemas y fotografías intervenidas. Presenta el mundo privado y la intimidad personal en relación, en consonancia o en contraste con los hechos que conmueven y afectan a la comunidad de manera precisa y sin artificios. Una obra siempre meticulosa que atiende al detalle tanto en la forma como en el fondo.
Andrea Perissinotto sobre Lina Ávila y su obra:
«Olor a césped recién cortado, azufre y miel, tierra mojada con cáscaras de limón y gaseosa. Una rosa en un invernadero olvidado, un mar bañado de invierno, petróleo y azúcar, leche y regaliz y fuego que inunda el vacío, apagando cualquier forma de resistencia. La naturaleza persiste en la obra de Lina Ávila como una bailarina silenciosa, una batalla de hojas crujiendo bajo los pasos de un devenir, pegado a ese otoño con cinta de doble cara, pero libre en su esencia transformadora.
La inquietud rosada y pálida de una juventud a punto de apagarse y la seducción de un cuerpo en la madurez de la conciencia y que empieza a experimentar la fatiga de unos años ya disfrutados, convierten a esa figurante en la protagonista de su propio baile. Es así como esa danza frágil y descontrolada se convierte en una pequeña montaña encima de una roca, oliendo a sangre y papel mojado, a pegamento y mostaza, arena en los ojos y sal fina en la cabeza mojada.
Llueve encima de un relato cada vez nuevo, que nace de experiencias ajenas, pero hermanas, historias que Lina ensambla en una composición que nos habla de mujeres en el pleno ejercicio de su sexualidad, como hizo en el proyecto El jardín secreto (en colaboración con Javier Jimeno), que presentó en el año 2019 en Ünnamed Gallery. Pero también sabe matizar el absurdo de un pudor que hemos vuelto a experimentar en tiempos recientes: un miedo innatural a imágenes de pezones o vaginas, que la artista incluye en la poesía de sus collages.
Si en El jardín secreto lo elemental de un cuerpo humano vuelve a pedir ayuda a la naturaleza protectora, que le presta unas flores para camuflarse, para medirse en un ejercicio visual de aceptación de lo más sincero y bello y agotador que nos hace estar y seguir vivos, en el ciclo Erotismo Ibérico la artista se deja llevar por una mistura de técnicas que brindan descaro y cierta lasciva materialidad a las piezas. Pero la mujer como elemento pasivo, para el deleite ajeno, ya no es una variable permitida en la creación de Ávila, si no, más bien, una incógnita variopinta cuyo signo de interrogación se yergue en forma de una “flor-clítoris”, ensalzándose en todo su vigor en el centro de la pieza.
Finalmente, según voy descubriendo a la profesional, la creativa, la mujer, la diseñadora gráfica y, en su conjunto, a la artista Lina Ávila, me doy cuenta de que comparto con ella un cierto afán por el perfeccionismo, por el trabajo bien hecho, por la investigación al margen de cualquier descubrimiento fortuito, donde lo imprevisible es bienvenido como elemento rompedor de un pragmatismo que ese caos, ciertamente, alivia.
Veo sus cuadernos llenos de experiencias táctiles y de apuntes bi (o tri) dimensionales y me descubro a mí mismo, bajo la piel arrugada de papeles que huelen a primer día de colegio, a primeros besos, a esas fragancias que ya conocen las formas del saber, las grietas de una existencia imperfecta pero llena de palabras, algunas más sabias que otras y, sin embargo, igualmente necesarias.»
ENTREVISTA A LINA ÁVILA
– ¿Cómo definirías tu obra?
Soy una artista empática con los acontecimientos por lo que mi obra es testigo y reflejo de la sociedad del momento. Experimentar con nuevos medios y formatos me resulta una interesante fuente de aprendizaje, más aún si aborda mejor lo que quiero expresar. Mis piezas nacen de inquietudes personales que pueden llegar a transmitir un sentir colectivo al poner el foco en aspectos sociales, políticos y de género.
– ¿Tu obra tiene un sentido vinculado a la temática de la mujer o por el contrario tiene un carácter que atañe a todos los géneros?
La temática femenina siempre ha estado ahí, en tanto que está ligada a mi persona. Por ello se ha ido desarrollando en mi obra de manera natural. Por otro lado, para mí se trata de un tema con una dimensión universal, ya que somos el 50% de la población mundial, aunque no estemos representadas de manera igualitaria, por eso considero que es un tema que merece ser abordado desde lo artístico.
– ¿De qué proyecto de los que has realizado te sientes más orgullosa hasta el momento?
De 5cm/s porque ha sido todo un reto para mí al pasar de usar el papel como soporte plano a componer con volumen.
5cm/s se origina a raíz de una intervención urbana que realicé durante uno de los primeros paseos permitidos en mayo 2020. Este es el punto de partida de una instalación floral realizada a partir de noticias relacionadas con la Covid-19. Con este proyecto, no solo hablo de nuestra capacidad de resiliencia, también presento la naturaleza como generadora de esperanza, debido a su capacidad inherente para crear vida. Este proyecto se completa con una serie de 7 piezas, donde intervengo fotografías con flores naturales y poemas elaborados con palabras recortadas procedentes de cartas de lectores publicadas en los últimos 12 meses. Junto con otra serie fotográfica que documenta la intervención urbana original.
Agradezco la confianza que Marta Martínez, comisaria del proyecto, ha depositado en mi trabajo y la generosidad de Carmen del estudio de artesanía floral Níkua.
– ¿Qué proyectos te gustaría realizar en el futuro?
Después de 5cm/s me gustaría continuar experimentando con diferentes técnicas y formatos. Ha resultado muy enriquecedor unir en un mismo proyecto una intervención urbana, una instalación, fotografía y técnica mixta.
Por otro lado, siempre me ha interesado el diseño editorial, especialmente en formato analógico, porque entran otros componentes como la textura y el olor del papel, la encuadernación,… Me encantaría trabajar más en este ámbito.
– ¿Es más complicado para una mujer artista desarrollar su carrera que para un hombre?
Creo que es más difícil como en todos los sectores, porque la visibilización de nuestro trabajo está más limitada, por lo tanto es menos conocido y reconocido, y en consecuencia, menos expuesto (y al revés) con lo que es más difícil poder desarrollar una trayectoria artística profesional. Si a esto sumamos que las tareas relacionadas con lo doméstico y los cuidados suelen recaer en nosotras, nos encontramos además con una menor disponibilidad para poder desarrollarla.
En este sentido me parece muy importante la labor que desarrollan distintas plataformas que trabajan para reivindicar el papel de las mujeres en el arte, como pueden ser Mujeres que cortan y pegan y Mujeres mirando a Mujeres, no solo como puesta en valor, sino también como referente y estímulo.
– ¿Qué aconsejarías a una mujer artista que comienza en este momento?
Dos cosas: que sea constante y perseverante.
Si es algo que hace con convicción, que no se rinda y que confíe en su trabajo.
También la animaría a pensar y desarrollar su trabajo artístico con otras mujeres, por ejemplo a través de proyectos colaborativos. Se crean sinergias muy interesantes, además de generar una poderosa red de sororidad.
– ¿Qué mujeres artistas han sido referentes para ti y en tu trabajo?
Siento especial debilidad por Agnès Varda, por cómo se retrata a sí misma como recolectora de imágenes, por esa capacidad de narrar por medio de la fragmentación, por su manera de comunicar aspectos profundos a través de lo cotidiano, su juego entre forma y fondo y su falta de miedo a experimentar con distintas disciplinas. Sin olvidarme de su espíritu jovial, reivindicativo y feminista.
– ¿Qué mujeres artistas recomendarías conocer?
Muchas. Por eso invito a conocer la iniciativa Woman Art House, donde se puede encontrar un gran número de mujeres artistas con sus respectivas trayectorias.
Por otro lado, siento una gran conexión con el trabajo de Paula Valdeón Lemus. Su obra me parece muy evocadora e inspiradora. Su tratamiento del paso del tiempo, la memoria y lo doméstico. Su concepto de hogar como contenedor de vida, espacios, tiempos,…
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